Tecnología en red para no dejar a nadie atrás

Descripción de la actividad de la organización

Atención social: acogida integral (ayudas), empleo y economía solidaria, familia, infancia, mayores, sin hogar, servicio jurídico y psicológico, migraciones, animación comunitaria, sensibilización y voluntariado. 2019: 1937 voluntario/as, 4.232 socias/donantes, 132 contratadas, 13.357 atendidas.

Sector

Otras Actividades de Servicios Sociales sin alojamiento

Nº de personas empleadas

25

Localización

Antecedentes

Situación de vulnerabilidad máxima generada por la pandemia en ciertos colectivos no atendidos por el sistema de protección. El confinamiento implica el cierre total de la red de 85 centros de acogida en Bizkaia, lo que conlleva al aumento de solicitudes de personas sin cuenta bancaria. Como consecuencia surge una urgencia social y la dificultad por parte de la organización de responder a ella con los medios y recursos actuales.

Reto

El reto principal consiste en habilitar canales de contacto y medios (no presenciales) para hacer llegar con seguridad, transparencia y trazabilidad recursos a colectivos sin cuenta bancaria, para garantizar su subsistencia. Con ello, CÁRITAS busca conseguir la modernización de los procesos de gestión de ayudas, manteniendo la justicia en la distribución y la transformación eficiente de los procesos internos.

Razones para ser considerado un Caso Práctico de Innovación

Porque se ha impulsado la implantación de un nuevo sistema interno para la organización que busca la gestión de ayudas económicas en una situación de emergencia, el confinamiento debido al Covid19. Es un método novedoso que ha trasformado el proceso interno, siendo actualmente un único sistema, con toda la información centralizada, digitalizada y con una trazabilidad y transparencia absoluta. Además, la aplicación ha resultado tan eficaz que se trata de un caso práctico de innovación abierta debido a la colaboración público-social realizada con el Gobierno Vasco y entidades del tercer sector.

Cáritas Diocesana de Bilbao, entidad establecida desde 1956, nace con una clara misión caritativa y social que trabaja por la justicia para personas en situación o en riesgo de exclusión a través de la acción social. Para ello, realizan un acompañamiento a las personas de forma integral, identificando la necesidad de hacer llegar ayudas económicas a familias/personas en vulnerabilidad y/o exclusión y siempre con perspectiva de dignificación en el apoyo para que se favorezca la autonomía personal.
En marzo de 2020 a raíz de la pandemia mundial y el confinamiento provocado por esta, surge una urgencia social. A su vez, se cierra la red de 85 acogidas en Bizkaia y se triplica la necesidad de forma inmediata, lo que conlleva el aumento de las solicitudes de personas, muchas de ellas sin cuenta bancaria. Estas personas que el confinamiento deja aisladas en Bizkaia, sin acceso a recursos sociales, ni contactos, son personas sin ingresos o que los pierden, en muchos casos sin posibilidad legal de solicitar servicios financieros básicos que les permitan el acceso a ayudas y con máxima precariedad en alimentación, sostenimiento de la vivienda o acceso a medicación.
Para poder afrontar la situación, se desarrolla un sistema informático que registra el itinerario de acompañamiento y evita duplicados en ayudas. Tanto los criterios de asignación, como el sistema tecnológico están en mejora continua con ajustes periódicos frutos del análisis de la realidad y la adaptación a las necesidades coyunturales de las familias/personas. A través de este soporte, la entidad consigue la adaptación a sus necesidades mediante la trazabilidad y conocimiento del usuario, agilizando todo el sistema e incrementando la seguridad y privacidad del proceso.
En este mismo contexto y situación se han encontrado otras entidades del tercer sector que se han sumado a Cáritas como entidad cabecera, por lo que se han creado sinergias en red con estas 10-12 entidades. Asimismo, se han generado diferentes alianzas que favorecen la iniciativa, por un lado, con entidades bancarias (Fiare Banca ÉTICA) para la gestión de ayudas digitalizadas y por otro con administraciones públicas (Gobierno Vasco) para desarrollar en un espacio compartido, con herramientas y criterios comunes y llegar a más gente.
Con todo, se ha conseguido llegar a un mayor volumen de personas con mucha agilidad, con trazabilidad total y con seguridad. Además de verificar la viabilidad del sistema para funcionar no solo en esta situación, sino como plataforma única en toda la entidad.

1. Rediseño del proceso interno integral que permite ofrecer el servicio en pandemia de forma coordinada y tiene la capacidad de detectar perfiles a los que aún no se llega.
2. Desarrollo de mecanismos que promueven la dignificación de la ayuda y autonomía de las personas.
3. Implantación del nuevo sistema de gestión de ayudas económicas para soporte vital a personas en situación de máxima vulnerabilidad, mediante:
a. Captación de nuevas herramientas tecnológicas y recursos financieros. Diseño de una APP propia accesible desde cualquier dispositivo que agiliza la recogida de datos, trazabilidad y registro de documentación.
b. Asignación y transferencia económica a móvil (HAL CASH) sin necesidad de cuenta bancaria, complementario del sistema de transferencia bancaria.
c. Alianza con administraciones públicas: creación del proyecto “Azken Sarea Indartzen” del Gobierno, con asignación de 5 millones de euros y que define a Cáritas como entidad cabecera.
4. Generación de una red junto a otras entidades del tercer sector, que analiza bajo criterio común, asigna ayudas y realiza diagnóstico y seguimiento de cada caso.
5. Reestructuración organizativa mediante la centralización y estandarización de procesos. Diferentes acciones internas llevadas a cabo como la reestructuración de equipos, contratación de personas, creación de nuevos perfiles administrativos, formación y la progresiva incorporación de equipos de voluntariado de la red propia a través de procesos de formación específica.

• En 2020, 2060 personas atendidas desde esta red con 9629 ayudas y un volumen económico de 2.403.276€ en ayudas.
• Ha provocado la modernización y mejora de todo el sistema de distribución de ayudas en Cáritas Bizkaia (casi 2 millones de euros anuales para más de 4000 personas).
• Reestructuración organizativa y de equipos, creando nuevos perfiles administrativos y empleo local.
• Viabilidad del sistema para funcionar en esta situación y presentado para implantar a nivel estatal.
• Dar visibilidad a la ausencia de derechos políticos (no acceso a cuenta bancaria) de muchas personas que residen en Euskadi.